Resumen de Memoria de mis putas tristes

Resumen de Memoria de mis putas tristes

«Memoria de mis putas tristes» es una novela escrita con la ayuda del reconocido escritor colombiano Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura. La historia es una reflexión sobre el amor, el deseo y el envejecimiento, asesorada desde el punto de vista de un anciano de 90 años que decide celebrar su cumpleaños recurriendo a la contratación de una prostituta adolescente para pasar la noche. Esta decisión le lleva a una experiencia de autodescubrimiento en la que muestra las ocasiones y experiencias que han formado su vida.

La novela es una complicada exploración de la condición humana, que toca temas como el paso del tiempo, la inevitabilidad del envejecimiento y la dinámica eléctrica que existe en las relaciones. La vívida e imaginativa forma de escribir de García Márquez crea un mundo que es a la vez melancólico y juguetón, y la historia es una reflexión sobre el anhelo de amor y conexión que de ninguna manera se desvanece. Ya sea como una meditación sobre el viaje humano o como una historia lírica de amor y deseo, «Memoria de mis putas tristes» es una obra de ficción cautivadora que invita a la reflexión.

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La nostalgia del autor

Memoria de mis putas tristes es una novela erótica de nostalgia del afamado escritor Gabriel García Márquez. El narrador anónimo acaba de cumplir noventa años y ha decidido regalarse una noche con una virgen. Sin embargo, después de noventa años sin conocer la dulzura del amor, no espera enamorarse de su joven compañera. Se encuentra obsesionado con esta joven a pesar de la realidad de que nunca comparten un diálogo y nunca consuman su relación íntima. Memoria de mis putas tristes es una novela de crecimiento personal, de enfrentarse a la propia mortalidad y de descubrir el amor por primera vez.

El narrador anónimo está a punto de pasar un buen rato en su nonagésimo cumpleaños, así que decide hacerse el regalo de una virgen. Llama a una madame con la que ha realizado negocios en el pasado, aunque no recientemente, y le pide que organice el encuentro. La madame protesta por el tema de la petición, pero opina lo mismo cuando el narrador accede a una ampliación de honorarios. Poco después, la madame llama y le dice que ha concertado que una mujer de catorce años le espere esa noche en su establecimiento. Él se viste con sus mejores galas y coge un taxi hasta el burdel.

El encuentro

Allí, el narrador toma una copa con la madame antes de ser dirigido a la habitación donde le espera la virgen. Para calmar a la chica, la madame le ha dado un tratamiento doméstico que la ha dormido. La madame le sugiere que tome la virginidad de la chica sin despertarla para protegerla del dolor de la experiencia. Se desnuda y se acuesta con la virgen, pero se muestra reacio a aprovecharse de su estado susceptible. En realidad, él duerme al lado de la chica, disfrutando de la sensación de dormir junto a cualquier otra persona. A la mañana siguiente, el narrador se marcha sin hablar con la chica.

Él es columnista de un periódico cercano. Él dirige al periódico para entregar su columna de la semana, la que prevé que será su última columna, y descubre que sus compañeros de trabajo han organizado una fiesta. Está tan emocionado por la fiesta que se resiste a publicar su columna. Sin embargo, siente que no tiene otra opción. Unos días más tarde, el narrador es llamado de nuevo al periódico, donde el director le dice que se niega a aceptar su dimisión. De nuevo reacio, consiente en seguir escribiendo para el periódico.

El narrador no puede dejar de pensar en la joven con la que pasó su cumpleaños. La experiencia le ha recordado al narrador las muchas chicas con las que ha compartido cama en el pasado. Todas las chicas con las que el narrador ha compartido cama solían ser chicas a las que pagaba por el placer. Una de estas chicas es su ama de llaves, una chica veinte años más joven que él que, sin embargo, acude a su casa una o dos veces por semana para limpiar. Recuerda una tarde en la que la estaba viendo hacer la colada y se sintió invadido por el deseo. Después, sintiéndose un poco culpable, el narrador aumentó los ingresos del ama de llaves para compensarla por satisfacer sus deseos tan pronto como al mes.

La obsesión

El narrador vuelve a llamar al propietario del burdel y acuerda compartir otra noche con la virgen. De nuevo solo duerme a su lado, imaginando una relación que ahora no existe. Sigue pensando en esta mujer incluso cuando está solo en casa con su gato. Pronto se encuentra pasando cada noche con esta chica. Está obsesionado y cree estar enamorado por primera vez en su vida. El narrador nunca ha estado enamorado ni casado, pero estuvo prometido. Había prometido a su madre que algún día se casaría y tendría una hija a la que debería poner el nombre de su madre. Se comprometió con una mujer por la que se sentía profundamente atraído, pero pronto se dio cuenta de que no tenía solo de qué hablar con ella. Cuando llegó el día de la boda, se negó a llevarla a cabo. Sin duda no se presentó en la iglesia, infligiendo a sí mismo ya su prometida una gran cantidad de vergüenza.

El narrador pasa casi todas las noches con su virgen, a pesar de que no se comunican en absoluto y de que nunca llega a saber su verdadero nombre. Una noche, un hombre es asesinado en el burdel. Como consecuencia, el burdel cierra durante varias semanas. Se vuelve loco esperando el regreso de su virgen. Cuando lo hace, la virgen va tan bien vestida que cree que ha surgido como prostituta. Se enfurece y destruye la habitación donde han pasado todo el tiempo juntos. Anuncia que de ninguna manera volverá a ver a la mujer. Sin embargo, al cabo de unos meses, se muere de ganas de volver a ver a su virgen. Tragándose su orgullo, el narrador vuelve al burdel y pasa la noche de su nonagésimo primer cumpleaños con la joven anónima.

Conclusiones de Memoria de mis putas tristes

«Memoria de mis putas tristes» es una novela poderosa y sugerente que explora los temas del amor, el deseo y el envejecimiento. A través de la lente de las experiencias del protagonista, García Márquez examina la condición humana, abordando el paso del tiempo, la inevitabilidad del envejecimiento y la dinámica eléctrica que existe en las relaciones.

La obsesión del protagonista por Delgadina refleja su anhelo de un amor juvenil y virgen, y la novela es una reflexión melancólica sobre la fugacidad de la belleza y la inevitabilidad del envejecimiento. El estilo de García Márquez, caracterizado por sus vívidas imágenes y el uso del realismo mágico, crea un mundo onírico que es a la vez melancólico y juguetón.

La historia es un conmovedor recordatorio de la importancia de la conexión y el amor en nuestras vidas, y del anhelo que no se desvanece. «Memoria de mis putas tristes» es una obra de ficción asombrosa y atemporal que permanecerá en la memoria de los lectores mucho después de que hayan terminado de leerla.

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