La Ley 50

Resumen de La Ley 50 de Robert Greene

Robert Greene, autor de otros libros como “Las 48 leyes del poder“, “Maestría” o “Las 33 Estrategias de la Guerra” se empareja con Curtis Jackson (50 Cent) para ofrecer una visión del mundo real sobre las leyes del poder y la perseverancia en La Ley 50.

Detalla las historias del ascenso de Jackson y disecciona cómo fue capaz de evolucionar y crear un impulso para escapar de las circunstancias extremas. Las secciones más interesantes del libro examinan los temas subyacentes en las historias de Jackson, como la intrepidez, la autosuficiencia y la persistencia.

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Es hora de enfrentarse a la realidad de La Ley 50

Cuando te cansas de la rutina, tu mente se sumerge en fantasías. Deseas que las cosas sean de una manera determinada y, poco a poco, te repliegas sobre tus pensamientos y deseos. Si las cosas van bien también puedes volverte complaciente.

La realidad se ha convertido en algo que hay que evitar. Nuestra cultura ha inventado diversas fantasías para que las consumamos. No puedes detener la propagación de la fantasía y el escapismo, pero puedes hacer algo para dejar de tener poder.

Estrecha tu conexión con el entorno, quieres claridad, no evasión y confusión.

Recupera la propiedad de tu vida

“No seas nunca un súbdito, sé siempre un propietario”

Las consecuencias de ser dependiente de la gente, conducen a una decepción constante y a necesidades insatisfechas. Cuando te demuestras a ti mismo que puedes conseguir las cosas por ti mismo, sientes una sensación de liberación. Puedes hacer que tu empresa sea un reflejo de tu individualidad.

Cultiva el gusto por tomar tus propias decisiones y ser dueño de tus errores porque lo que realmente debes valorar en la vida es la propiedad, no el dinero. Cuando te adueñes de la propiedad tendrás más capacidad para tomar decisiones diferentes y no estar encorsetado por alguien.

Ante tantas dificultades y competencia en el mundo adulto, una parte de nosotros anhela volver a esa posición infantil de dependencia. Mantenemos una cara de adultos y trabajamos para ganar poder para nosotros mismos, pero en el fondo deseamos secretamente que nuestros cónyuges, parejas, amigos o jefes puedan ocuparse de nosotros y resolver nuestros problemas.

Todo el mundo se rige por el interés propio. Nuestros jefes nos mantienen cerca por necesidad, no por afecto.

Cultivar la aceptación

Enmarcar mentalmente un acontecimiento como una bendición disfrazada hace que sea más fácil seguir adelante, cuenta Greene en La Ley 50.

La verdad es que la vida, por naturaleza, es competitiva y dura. No importa cuántos recursos hayas acumulado, alguien buscará quitártelo. No hay circunstancias adversas, sólo la vida es así. Si te llega publicidad negativa, piensa en ella como una forma de atención negativa que puedes reencuadrar fácilmente para tus fines.

En general, los obstáculos obligan a tu mente a concentrarse y a encontrar formas de evitarlos. Aumentan tus facultades mentales y deben ser bienvenidos. Así pues, todo es un obstáculo, un problema que hay que resolver, una montaña que hay que escalar.

Sé asertivo

Si tu principal objetivo es caer bien, esto se convierte en un escudo defensivo (reflejo de miedos profundos). Lo que quieres, en cambio, es sentirte seguro y fuerte desde dentro. Debes estar dispuesto a disgustar de vez en cuando a la gente y sentirte cómodo enfrentándote a quienes se oponen a tus intereses.

En tu vida diaria debes hacerte valer más de lo habitual. Te enfrentas a un agresor en lugar de evitarlo o elaboras una estrategia y presionas para conseguir algo que quieres. Te darás cuenta de que tus miedos han exagerado las consecuencias de este comportamiento.

La gente tomará de usted lo que sabe que puede. Si perciben que eres el tipo de persona que acepta y se somete, presionarán y presionarán hasta que hayan establecido una relación de explotación contigo. Debes demostrar que algunas líneas no se pueden cruzar.

Un príncipe o líder debe ser ante todo eficaz en sus acciones y para ello debe ser el maestro del arte de saber cuándo y cómo ser malo, nos cuenta Greene en La Ley 50. Esto requiere intrepidez y flexibilidad.

La vida implica naturalmente intereses en conflicto; la gente tiene sus propios asuntos, sus propias agendas, y éstas chocan con las tuyas. La lección de la vida es: la gente te quitará continuamente; si dudan de tus poderes, te desafiarán.

Acércate a tu entorno social en La Ley 50

Dinámica de grupo: la dinámica natural de cualquier grupo es dividirse en facciones. Las personas quieren proteger y promover sus propios y estrechos intereses, por lo que forman alianzas políticas desde dentro.

La fuente de su poder es su sensibilidad y cercanía al entorno social. Somos menos pacientes y capaces de ver el panorama general. Ser un líder significa que estás desempeñando un papel, al frente, impulsando sin miedo al grupo.

Tienes que conectar con tu entorno, obtener feedback lo antes posible. Hablando con el público te haces una idea de su forma de pensar y puedes idear creativamente planes de marketing. Para llegar a la gente debes tener acceso a su vida interior, a sus frustraciones, aspiraciones y resentimientos. Debes dar voz a las ideas y deseos de la gente.

Nunca debes sentir miedo o afrenta por las personas que tienen formas diferentes de pensar o actuar. Debes entusiasmarte con esa diversidad. Ábrete para entender lo que hace vibrar a los demás, para conocer la vida interior de las personas, cómo ven el mundo.

Utiliza las críticas de la gente

La gente quiere ver ciertas cualidades en ti. Proyectan en ti sus propios miedos y fantasías. Quieren que encajes en un patrón convencional, utilizan etiquetas para intentar limitar tu comportamiento y ponerte una máscara.

Conformarse con las expectativas de la gente es más seguro y más cómodo. En esencia, tienes miedo de ser tú mismo y de lo que podrías llegar a ser. Si no bailas o te retiras teniendo en cuenta otras opiniones. Ahogas su voz que a menudo se traduce en dudas dentro de ti. Cuando elevas tu opinión sobre ti mismo, te sientes más cómodo asumiendo riesgos, sabiendo que siempre podrás volver a caer de pie.

La gente te atacará constantemente en la vida. Una de sus principales armas será inculcarte dudas sobre ti mismo, sobre tu valía, tus capacidades, tu potencial. Lo disfrazarán de opinión objetiva cuando en realidad es política: para mantenerte en el suelo.

Eres propenso a creer estas opiniones si tu ego es frágil. Si tienes un propósito más grande y un destino más elevado, los ataques de la gente sólo te hacen más decidido y enojado.

Debes evitar ver los juicios de la gente como una forma de confinamiento. Tu tarea es conservar o redescubrir aquellos aspectos de tu carácter que desafían la categorización.

Recuerda que si te quedas igual acabas siendo predecible y débil.

El trabajo duro es el camino hacia la maestría

Ahora que tenemos todas nuestras necesidades de supervivencia cubiertas, nos enfrentamos a una nueva libertad. Por lo tanto, la mente ahora tiene una tendencia a gravitar hacia las ansiedades sobre el futuro – posibles problemas y peligros. Así que tenemos este deseo que nos persigue hasta el día de hoy de escapar del aburrimiento a toda costa, para distraernos de las ansiedades.

Los entretenimientos actuales tienen un ritmo más rápido que el tiempo que pasamos en el trabajo. El trabajo se vive entonces como algo aburrido, lento y repetitivo. Si vamos lo suficientemente lejos en la dirección de los impulsos, nos resulta cada vez más difícil reunir la paciencia para soportar el trabajo duro.

Para llegar a la maestría, hay que aprender los distintos pasos y procedimientos que conlleva, procediendo a niveles cada vez más altos o de competencia. Esto requiere disciplina y tenacidad: la capacidad de soportar la actividad repetitiva, la lentitud y la ansiedad que conlleva este reto.

Las personas que tienen disciplina suelen tener un profundo deseo de poder y un sentido de urgencia.

Los tipos intrépidos de la historia muestran inevitablemente en sus vidas una mayor tolerancia que la mayoría de nosotros a las tareas repetitivas y aburridas.

Conclusiones de la Ley 50

En resumen, “La Ley 50” es un libro que ofrece a los lectores una perspectiva única del éxito, basada en las experiencias y puntos de vista de dos individuos muy diferentes: un rapero de Queens y un autor de bestsellers. Al hacer hincapié en la importancia de la valentía, la confianza en uno mismo, la adaptabilidad y la creatividad, el libro proporciona a los lectores un conjunto de estrategias y principios que pueden ayudarles a alcanzar el éxito en cualquier campo.

Si este resumen de La Ley 50 de Robert Greene le ha gustado, otros resúmenes, como “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva“, “Pre-suasión” y Los mejores libros sobre Liderazgo, le encantarán.

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